• Memorias

    En busca del alma

    Los niños son el símbolo del eterno matrimonio entre el amor y el deseo, decía Oscar Wilde. De eso no me cabe duda. Uno de los objetos de mis deseos más intensos durante mi niñez fue la vieja máquina de escribir de mi padre. La primera vez que llamó mi atención yo era aún demasiado pequeño para intentar hacerlo algo útil con ella. Pero la curiosidad al final se abrió paso y empecé a hacerla funcionar del único modo que conocía, es decir, como un instrumento capaz de producir una hoja llena de palabras salidas de la propia cabeza. Porque jamás vi a mi papá copiar nada ni a nadie.…

  • Memorias

    Visita inesperada

    Llegaste a buscarme a mí. Sin planes, sin anuncios, así no más, traído por la vida. Ayúdame a recordar si fueron dos o tres las horas que pasamos juntos. Las horas en que pusimos en paréntesis las obligaciones del día para inventar -en una cadena interminable de instantes- mil y una manera de pasarla bien, sorprendiéndonos mutuamente, burlándonos el uno del otro y riéndonos de todos a nuestro alrededor. Tu abrazo me enterneció, tus ojitos brillantes y tu sonrisa tímida me hablaban de tu alegría de verme, la misma que sentí yo al verte cruzar mi puerta. Nos bastaron pocos segundos para entrar en complicidad. En seguida vinieron los dos…

  • Memorias

    Veintiún años

    Isabel cumple 21 años. Nueve de ellos los pasamos juntos. Sus primeras señales de vida en el vientre de su madre, la expectativa de su nacimiento, su primer gemido detrás de esa vitrina, la primera sensación de su calor sobre mis brazos, la ilusión de su llegada a casa, mi primer insomnio, la genuina felicidad de sus hermanos mayores al conocerla y esa sensación tan explicable de esta si la hago bien que me invadió desde el primer aviso de su posible arribo a mi vida, son recuerdos esenciales que hablan algo de mí mismo y que han quedado registrados bajo mi piel. Cuando cumplí 20 años nunca imaginé que…